Agustín Lara Esqueda
¿Qué es Vikút?
El origen del Vikút ®: una sinérgica sorpresa: El Vikút® es un adyuvante para la sanación de heridas el cual fue producido inicialmente como antiséptico tópico para heridas crónicas; sin embargo, ha probado su efectividad en heridas tanto crónicas como agudas .
El Vikút® está compuesto por 4 sustancias: el permanganato de potasio, el etanol, el ácido salicílico, y el ácido benzoico.
1.- El permanganato de potasio: un inesperado aliado: Es un potente agente oxidante y astringente. Sus propiedades químicas muestran propiedades específicas que lo hacen útil para el tratamiento de heridas.
La primera es su capacidad de cauterización química, producida por la oxidación de materia orgánica de los tejidos; la aplicación clínica de esta propiedad ha sido observada en la medicina veterinaria y en la medicina humana.
La segunda es su actividad antimicrobiana contra bacterias, hongos y virus. Como oxidante, el permanganato de potasio presenta la capacidad de disrumpir la materia orgánica de las bacterias, incluyendo pared celular, membrana citoplasmática, proteínas y ADN y su capacidad de destruir biopelículas solo tiene sustento clínico.
La tercera es su capacidad de sanación de heridas, ya que su administración está vinculada con la sanación de heridas y la reparación de uñas encarnadas
El permanganato de potasio está incluido en el formulario modelo de la OMS, la cual es una fuente de referencia para medicinas esenciales para uso de escritores de directrices; es usado para tratar impétigo, heridas superficiales supurantes y tinea pedís (pie de atleta).
Dado a la emergencia de bacterias resistente a antibióticos, tratamientos tópicos tales como el permanganato de potasio o las partículas de plata son cruciales para la prevención y terapia de heridas nosocomiales.
Etanol: el perfecto mezclador: O alcohol etílico es el segundo alcohol más simple y tiene múltiples usos, como el de un solvente adecuado. Utilizado en una concentración entre 70% y 85%, es utilizado como antiséptico y dérmico y desinfectante de superficies, el primero debido a su capacidad de desnaturalización de proteínas e inhibir su síntesis. El etanol es efectivo contra bacterias y hongos, así como contra múltiples virus; sin embargo, es inefectivo contra endosporas. A pesar de esto, su amplio espectro de acción es particularmente útil contras bacterias sésiles como las BEB’s.
Ácidos Salicílico y Benzoico: un antiguo, pero buen equipo.
El ácido salicílico es un tipo de ácido fenólico identificado como un antipirético y antiinflamatorio, disminuyendo la formación de prostaglandinas proinflamatorias al modularlas. Adicionalmente, el ácido salicílico tiene propiedades exfoliantes y de descamación, haciéndolo un útil ingrediente cosmético.
Adicionalmente, presenta actividad bacteriostática, y existe evidencia de la capacidad tanto del ácido salicílico como del acetilsalicílico de destruir biopelículas; sin embargo, existe desacuerdo respecto a esta capacidad, sugiriendo otros estudios el efecto contrario.
Con lo que respecta del ácido benzoico, ha demostrado a su vez su capacidad bacteriostática .
Tanto el ácido salicílico como el benzoico están incluido en el formulario modelo de la OMS. El ácido salicílico está indicado principalmente para uso tópico y, en combinación con otras sustancias; mientras que su primo molecular, el ácido acetilsalicílico, es más usado en ingesta oral. Se le describe teniendo actividades tanto queratolítica como antimicrobiana; a su vez, es prescrito para tratar la tiña, infecciones de dermatitis leves, dermatitis seborreica, ictiosis, acné vulgaris, y verrugas. Respecto al ácido benzoico, solo aparece en conjunto con el ácido salicílico en ungüento o crema denominada “ungüento de Whitfield” con proporciones ácido benzoico: ácido salicílico del 6%:3%, el cual es usado para el tratamiento de infecciones dermatofíticas leves como la tinea.
Respecto a otras aplicaciones, se les conoce a ambos compuestos por su capacidad de desbridamiento de heridas al disolver materia necrótica.
Comparación entre antisépticos y antibióticos tópicos: A pesar de sus aparentes similitudes, los mecanismos de acción del antibiótico y del antiséptico son bastante diferentes; esto se debe a que los antibióticos actúan sobre mecanismos y estructuras distintivas de las bacterias, mientras que los antisépticos dependen de métodos más disruptivos como emulsionar y desnaturalizar al microorganismo, y debido a esto, su espectro de acción es más amplio.